Dentro del Parque Natural de la Serra Gelada nos encontramos esta antigua explotación de extracción de tierra para la construcción (si no a ver como se iban a levantar tantos rascacielos) y posterior vertedero de residuos inertes.
Nos pareció un lugar interesante para ver cómo la naturaleza va recuperando el terreno perdido (o mejor dicho, robado) y cómo se encuentra tantos años después de este desastre ecológico. Un verdadero despropósito que queremos sacar a la luz de nuevo.
Historia
Vamos a contar paso a paso lo que ha pasado en este lugar y al final os contaremos como se encuentra actualmente.
Camino sinuoso que te lleva al hueco que queda hoy en día |
Nos remontamos 20 años atrás, al 1996. La concesión que permitía a Orozco explotar estas tierras para la extracción de áridos termina y el Ayuntamiento de Benidorm se plantea por primera vez su restauración. El promotor es el mismo Ayuntamiento.
¿Cómo? es la pregunta que os estaréis haciendo. Pues mediante el vertido de residuos inertes, que son aquellos que no sufren ninguna alteración física, química o biológica importante a lo largo del tiempo.
Sin embargo, en 2001 el PSOE denuncia vertidos tóxicos en el desarrollo del proyecto.
Plantas nitrófilas cubren el montónn de escombros que se depositaron. |
En 2003, vecinos alertan de una posible avalancha debido a la gran cantidad de residuos que se estaban depositando y que estaban sueltos. El PP rescinde el contrato a Urbaser. ¿Y a quién se le adjudica? Al antiguo explotador de la cantera, Orozco. ¡Viva Benidorm!
La historia no cambia y se sigue vertiendo basura en el Parque Natural. Hasta 2006 cuando se les rescinde el contrato por la polémica que desataba el asunto.
En 2007, vecinos denuncian la emanación de gases tóxicos, de mal olor, que afectan a la respiración y provocan mareos (más adelante veréis porque).
En 2009, el Ayuntamiento de Benidorm, tras la amenaza de la UE de una multa millonaria, se comprometió a restaurar la zona. Pero este proyecto no se llegó a redactar. Un proyecto que debería haber pagado Orozco, al que se le condenó por vertidos no autorizados en la cantera, pero que nunca lo hizo porque todo quedó en el olvido.
En la actualidad
Grandes paredes que impiden la formación de suelo y germinación y una casi imposible regeneración natural de la zona |
Para visitar la zona hay que dirigirse hasta la depuradora y seguir el camino que te lleva hasta lo alto de la cantera. Hay que pegarse un pateo importante subiendo por las laderas de la escombrera hasta llegar al vaso de la cantera.
Por el camino vemos que la fauna se ha apoderado del lugar, ya que nos encontramos bastantes conejos, además de lagartijas y numerosos insectos (ya llegó la primavera).
Conejo saltando entre tierra y escombros |
En las laderas donde se vertieron escombros, se puede apreciar la alta cantidad vegetación nitrófila (las primeras colonizadoras de cualquier hábitat, sobre todo entropizado y fertilizado como éste).
Pronto veremos un ejemplo de lo que os hablaba anteriormente, las lluvias nos han quitado la capita de tierra de encima y nos muestra lo que realmente hay bajo nuestros pies, BASURA. Y basura de todo tipo, como podéis ver, ladrillos, tubos de PVC, plásticos y bolsas varias, restos de hierro para construcción y demás porquería que os podáis imaginar.
La imagen habla por sí sola |
Una vez arriba, nos asombran las paredes tan verticales que dejaron. AHora sirven de refugio para algunas aves como los aviones, vencejos, los córvidos y algunos halcones y cernícalos que han encontrado aquí su hogar (la acústica aquí es bestial, un placer escuchar los gritos de estas aves).
Pareja de cuervos (Corvus corax) |
Halcón peregrino (Falco peregrinus) |
Pero… de repente un olor muy desagradable nos viene a ráfagas, como si te encontrases dentro de un laboratorio. Un olor raro, que no sabemos identificar, pero que nos da en la nariz que no es bueno. Y no, no viene de la depuradora.
Nos damos cuenta de que procede de una chimenea que se encuentra podrida a unos metros de nosotros. Si te acercas, puedes llegar a ver el humo blanco que sale de ella (en la foto era difícil sacarlo por el sol).
Sobresale unos 2 metros del suelo pero no sabemos que profundidad tendrá, ni que es lo que saldrá de ahí (seguramente gases procedentes de la descomposición de materia orgánica). Recordemos, esto era un vertedero de INERTES. Si andamos un poco más, veremos que no es la única que hay.
Chimenea por donde salen gases desconocidos. Al fondo, Benidorm. |
Seguimos avanzando y recorriendo el lugar y como no, no podía faltar el colchón abandonado, los cartuchos de escopeta (de aquellos que se jactan de que cuidan el medio ambiente) y demás restos de basura que no se enterró pero que no puede faltar en ningún espacio natural del s. XXI.
Como no hay suciedad suficiente enterrada, también dejamos algo en la superficie |
Residuos de aquellos que se autodenominan cuidadores de la naturaleza |
Respecto a la vegetación que hay en la zona, el matorral mediterráneo se encuentra en una etapa inicial y de colonización. Las nitrófilas ganan espacio a la coscoja, la carrasca, el tomillo, las jaras, la bolaga o las especies aromáticas como el romero o la lavanda, aunque podemos ver varios ejemplares de palmito.
Diversos ejemplares de acacia |
Solo encontramos una especie arbórea, la acacia. Una planta exótica, de origen australiano, muy utilizada en jardinería por sus flores amarillas, muy vistosas, y por su rápido crecimiento, aunque de corta edad e invasora. Otra exótica invasora es la planta del tabaco (Nicotiana glauca), desgraciadamente muy común en nuestra zona, prácticamente es la dueña del lugar. También encontramos bastantes plantas utilizadas en jardinería como la lantana o diversos cactus de orígenes muy lejanos a nuestro bosque mediterráneo. Es decir, lo poco que hay, es foráneo y no debería estar.
Algunas de las plantas de jardín, exóticas e invasoras que se encuentran en la zona |
Todo un despropósito
Se empezó cediendo suelo en medio de un bosque de rica biodiversidad, para la extracción de tierra para la construcción.
Tras dejar un boquete que se ve a kilómetros de distancia, con un impacto paisajístico bestial, se olvida su restauración posterior por la empresa que lo explotaba. El ayuntamiento de Benidorm concede a una empresa un permiso para convertir este boquete en un vertedero de inertes y así poder rellenarlo para taparlo. Sin embargo, allí se echaba inerte, biológico y todo lo que se pillaba.
De nuevo, se le adjudica a la empresa que hizo el boquete, su regeneración y restauración paisajística (ya sabéis, rellenar el hueco y plantar arbolitos propios del lugar para dejarlo como estaba antes de todo). Pero en lugar de ello, se dedican a seguir echando basura (el doble de lo que se le permitía) y restos vegetales (de forma ilegal) y a triturar caliza para venderla (algo para lo que carecían de permiso también).
Orozco hace lo que quiere y se les echa del lugar (aunque esta empresa siguió tendiendo adjudicaciones de obras en Benidorm muchos años después) dejando la zona llena de porquería, sin restaurar, emitiendo gases desconocidos y sin restauración alguna.
A día de hoy, más de 20 años después del fin de la explotación de la cantera seguimos teniendo un boquete, tapado parcialmente por basura y emitiendo gases. Bravo.
Bibliografía
Fran Mercader Román