Situada en la ladera norte del Montgó, en la umbría, y con vistas a la ciudad de Denia y el litoral valenciano, nos encontramos la Cova de l’Aigua, una cueva con mucha historia.
Aprovechada desde tiempos de los romanos y los árabes, esconde un secreto en lo más profundo de la misma que os invitamos a conocer.
Ruta a la Cova de l’Aigua del Montgó
Se trata de una ruta que no llega a los 4 kilómetros pero con un desnivel positivo nada despreciable de unos 385 metros. Algo alcanzable para cualquier senderista pero quizás algo exigente para los poco habituados a la montaña. No dispone de ninguna dificultad su acceso por lo que la califico como fácil.
Cómo llegar al inicio de la Ruta a la Cova de l’Aigua
Aquí os dejamos el lugar exacto en el que se puede dejar el coche a un lado de la carretera, siempre y cuando no moleste a los vecinos. Ahí hay varios carteles y paneles con información sobre el parque natural y las rutas que podemos hacer por el mismo. Desde aquí también se puede subir a la cima del Montgó.
La ruta parte de una de las miles de urbanizaciones que acosan a este parque natural. Y hay que adentrarse a pie por el Camí de la Colonia o Carretera de la Colònia, solo accesible a vehículos del parque.
Subiremos un pequeño zigzag, observando la flora que cubre las faldas del Montgó, donde podemos observar alguna planta endémica del parque como la herba santa, que solo crece aquí y en la isla de Ibiza. Este camino también nos lleva hasta la cima de esta mítica montaña, por lo que las indicaciones son las mismas que si deseas subir hasta la parte más alta.
Antes de que el camino se ensanche formando una especie de mirador, hay que coger una pequeña senda que sube directa a la cueva por un camino frondoso y resbaladizo por encontrarse en la umbría del Montgó. Esta senda serpenteante sigue ascendiendo con bastante pendiente hasta llegar a la Cova de l’Aigua, nuestro objetivo de hoy.
La Cova Bolumini
Situada en la cara norte del Montgó y visitada desde hace miles de años, los soldados romanos de la Legión VII Gemina en el año 283 d.C grabaron un epígrafe a la entrada de la cueva, que hoy en día se encuentra protegido de los vándalos por una valla.
Tras estas rejas, se encuentra la Cova Bolumini, conocida así por la fina arcilla que se encontraba en su interior y que los árabes extrajeron hasta agotarla. Este material era utilizado para la fabricación de vasijas y demás utensilios de cocina.
La Cova de l’Aigua del Montgó
A unos 12 metros sobre ésta, se encuentra la Cova de l’Aigua, en la que se observan numerosas intervenciones del hombre a lo largo de los años y que ahora han puesto en valor con la instalación de pasarelas de madera.
Su nombre se debe al agua de lluvia que se filtra por los poros de la montaña y sale por estas cavidades. Los árabes quisieron aprovechar este recurso tan escaso construyendo una presa y una serie de canales para conducirla y guardarla. Hoy en día aún se pueden ver estas construcciones, llenas de grafitis recientes.
Pero lo mejor se encuentra al fondo de la cueva. Un pequeño lago de agua y un gran muro que oculta un enorme canal excavado en la roca para aprovechar estas filtraciones de agua.
Las vistas desde la cueva son espectaculares.
Track GPS de la ruta a la Cova de l’Aigua del Montgó
Aquí os dejamos la ruta a la cueva. Una ruta muy fácil de seguir.