Descubre unas cuevas excavadas en la roca que se utilizaban en la antigüedad para guardar el alimento. Se trata de la Cova de les Finestres de Alfafara, un pequeño pueblo del interior de la Comunidad Valenciana.
Ruta a la Cova de les Finestres
En nuestro caso, realizamos una ruta un poquito más larga, ya que también fuimos al Mirador del Toll Negre. Una pequeña poza oscura situada en el Barranc del Pantanet. Y la verdad que mereció la pena.
La ruta comienza en la Ermita de San Antonio Abad y la Virgen de la Luz. Aquí podemos dejar el coche sin problema y seguir andando por el camino forestal.

Después pasaremos por un par de masías antiguas abandonadas, el Mas de Carbonell y el Mas d’Enmig. Tras esta última, encontraremos el sendero que baja hacia nuestro objetivo de hoy, la Cova de les Finestres. Un sendero muy pedregoso y algo resbaladizo gracias a su gran pendiente.
El origen de la Cova de les Finestres
Se le conoce así a una cavidad natural que antiguamente se usó para guardar el rebaño (hace un siglo). Esta cavidad esconde varias galerías excavadas en la roca que se encuentran entre 4 y 10 metros bajo el suelo. Muchas de ellas están comunicadas y algunas de ellas, salen al exterior en forma de ventana.
Una escalera de madera y una cuerda nos ayuda a entrar en estas cavidades (solo las inferiores) para hacernos una idea de cómo son por dentro. Se han encontrado restos cerámicos de época medieval e islámico. Así como de la Edad de Bronce, por lo que la fecha exacta de su origen es bastante incierta.



Lo que si que parece cierto es que se usaron como silos, es decir, para guardar comida. Más que nada por la forma que tienen, ya que son cavidades extremadamente pequeñas, en las que no te puedes poner de pie y con grandes agujeros en el suelo.
Mucha gente termina la ruta aquí y vuelve por el camino que hemos venido. Hablamos de una ruta entonces de unos 4km, que puedes hacer con los niños bastante asequible.
En nuestro caso, cruzamos el río Clariano para continuar la ruta hacia el Mirador del Toll Negre.

Seguimos las líneas amarillas y blancas (aunque nosotros acortamos por seguir un track un poco raro) y llegamos hasta la vía del tren. Aquí, veremos una antigua estación en ruinas llena de vegetación junto a una gran carrasca. Ambas bastante fotogénicas, la verdad.
Volveremos a cruzar el río hasta un poste que nos indica el desvío, junto a una gran balsa abandonada. Seguimos dirección Alfafara.
Mirador del Toll Negre
Ahora el camino se pone serio y empezamos a subir para llegar hasta el mirador. O lo que queda de él, ya que la mitad de las tablas de madera faltan. Con mucho cuidado, posamos para las fotos mientras disfrutamos de un precioso atardecer y del sonido del agua bajando por el Barranc del Pantanet.

El camino sigue subiendo, seguimos las marcas del PR-CV 389, hacia el Cabeçó de Mao. Con 602 metros de altitud supone una de las cimas de esta pequeña sierra. A partir de aquí, improvisamos un poco (se nos hacía de noche) por lo que acortamos por una senda no muy visible (mirar el track al final). Pasamos cerca de una casa en cuyo jardín tenía la típica casa donde secuestran a niños en medio del bosque.
Track GPS
Aquí os dejamos el track de la ruta que hicimos nosotros, y que tuvimos que acortar por tiempo. Se puede hacer más corta o más larga.
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